Dicen que cuando dos almas están destinadas, la vida encuentra la manera de cruzarlas. Nos conocimos en el momento más inesperado, sin imaginar que esa charla casual, esas risas y esa conexión instantánea serían el inicio de todo. Desde ese día, el tiempo empezó a tener un nuevo significado… porque cada momento juntos se sintió como estar en casa.
Nada planeado, nada perfecto —solo nosotros. Una cena sencilla, nervios disfrazados de risas y una sensación de que el mundo se detenía por un instante. Esa noche entendimos que lo especial no estaba en el lugar, sino en la mirada del otro. Fue el primer capítulo de una historia que no ha dejado de crecer.
El amor, cuando es real, no necesita grandes palabras… solo el momento perfecto. Con el corazón latiendo más fuerte que nunca, llegó la pregunta que cambiaría nuestras vidas: “¿Quieres casarte conmigo?” Y entre lágrimas, risas y emoción, dijimos sí a todo: a los sueños, a los planes, a la aventura de compartirlo todo.
Desde ese día, todo se sintió diferente: más ligero, más brillante y lleno de significado. Empezamos a soñar en grande, a planear nuestro futuro un recuerdo a la vez. Cada mirada, cada risa, cada momento juntos nos recordaba por qué nos elegimos… y por qué seguiremos eligiéndonos, cada día de nuestras vidas.
Nov 22, 2025, Hacienda San Luis de Peñalisa, Ricaurte, Cundinamarca
Confirma tu asistencia